RollerCoaster Team 2011

Posiblemente esta sea una de las entradas que más ganas he tenido de escribir desde que, hace un año, inicié la vida de este blog. Para los que no estáis familiarizados con el concepto RollerCoaster Team os invito a leer los relatos de las aventuras de este equipo de freaks amantes de los parques, las coasters y los viajes:

• RollerCoaster Team 2008: Alemania central
• RollerCoaster Team 2009: Inglaterra
• RollerCoaster Team 2010: Alemania en canal

Durante tres años el RollerCoaster Team ha ido creciendo un poco más durante cada año, el primer año iniciamos la movida y nos decidimos a estrenarnos de la mejor manera: visitando tres parques alemanes obligatorios para cualquier entusiasta, eramos 3 personas y apenas teníamos experiencia en los vuelos, el alquiler de coches o las reservas de alojamientos.
El segundo año nos propusimos el reto de expandir el grupo y, aun siendo todavía 3 miembros, uno de ellos era totalmente nuevo. No sólo llegaba hasta aquí la expansión, sino que el cupo de parques a completar pasó de 3 a 4 y ese cambio incluía la visita a un país diferente, con moneda diferente e incluso normas de conducción diferentes.

El tercer año tiramos la casa por la ventana. Ampliamos el grupo hasta un total de 5 personas añadiendo a dos grandes expertos en el tema que, por motivos de la vida, no habían podido viajar demasiado a parques internacionales y necesitaban expandir fronteras. El reto llevaba incluido el hecho de visitar hasta un total de 6 parques y hacer una de las rutas a coche más completas desde la Alemania del sud hasta prácticamente llegar al límite con el norte.
Por eso, y debido al carácter de crecimiento del grupo y de nuestras metas, este año decidimos que debería ser no sólo un año más ambicioso, sino el año en el que montaríamos el viaje que cambiará nuestras vidas por completo. Este año toca mirar en dirección a la meca de los parques, toca poner nuestra mirada en el país de las oportunidades, toca cumplir una enorme misión a través algunas de las ciudades y estados más ricos del mundo. Señores, señoras, ¡este año toca pisar tierra estadounidense!

Boceto de la aventura

Desde un primer momento tuvimos claro que el viaje de este año sería más complejo en todos los sentidos. Al fin y al cabo, los parques americanos están hechos de otra pasta y sus dimensiones, así como la cantidad de credits por parque, obligan a cambiar la perspectiva con la que tomarse los viajes.

Decidimos, en la medida de lo posible, conservar el número de miembros en el grupo ya que es una cifra agradable sin llegar a crear problemas a la hora de alquilar un coche o repartir los gastos. Decidimos también que se debería ampliar, debido a la envergadura del tour, la cantidad de días disponibles para el mismo, llegando a pensar incluso en las dos semanas de duración para así poder repartir bien todo.

Otro objetivo que quedaba claro desde un primer momento es que la costa este iba a ser nuestro objetivo ya que es la que reúne, a priori, la mayor cantidad de parques interesantes en todo el país. Teniendo estos targets claros, decidimos ya en el viaje de 2010, con Silverstar al fondo y unas buenas copas en la mano, que el viaje se forjaría justo al acabar el verano, con bastante anterioridad respecto a las organizaciones de los 3 tours anteriores.

La primera reunión

En octubre de 2010 hicimos el primer tanteo, para saber quiénes seríamos los afortunados de pertenecer al viaje del año siguiente, por lo que finalmente se decidió que el grupo perdía un miembro y seríamos 4: Marc, Javi, Raúl y servidor.

En las reuniones no se suelen sacar fotografías, aunque este fue una pequeña excepción.

En esa primera reunión también se empezó a dibujar toda una serie de ideas en forma de brainstorming de parques, nombrando hasta una decena de recintos que, como es lógico, queríamos visitar con ansias.

Había, eso sí, algunos elementos comunes decididos ya desde primer momento, como por ejemplo:

• Visitar NuevaYork y, en concreto, Manhattan, durante al menos una jornada.
• Visitar SixFlags Great Adventure.
• Visitar Cedar Point.

A partir de ahi surgieron un montón de parques candidatos a ampliar el cupo: Six Flags New England, King Dominion, King Island, Dorney Park, Valleyfair, etc. Incluso hubo momentos en los que el plan estuvo a punto de cambiar radicalmente y se sugirió, una vez aterrizados en EEUU, tomar otro avión que nos llevara a la costa oeste para disfrutar de parques como SixFlags Magic Mountain.

Hay que analizar decenas de mapas de recorridos y situaciones de parques.

Tras un par de reuniones a las puertas del invierno, quedó claro el objetivo final del viaje que no varió hasta el día de hoy: Manhattan, SixFlags Great Adventure, Hershey Park y Cedar Point.

Posteriormente a esa decisión, han habido dos añadidos reseñables: Lakemont Park, situado a medio camino entre Hershey Park y Cedar Point; y Dorney Park, justo entre el largo camino de Cedar Point hasta Nueva York. Ambos parques son considerados, en todo caso, extras del viaje que pueden ser completados o pueden ser substituidos por horas de descanso o de viaje, dependiendo de cómo veamos nuestra fuerza de voluntad.

Trabajo de hormigas hasta primavera

Durante los primeros meses del año nos marcamos también los primeros pagos gordos, como habíamos estado haciendo en anteriores viajes. En diciembre, con medio año de antelación, decidimos adquirir nuestros billetes de avión, a sabiendas que a partir de febrero los precios y las tarifas empiezan a bailar peligrosamente, costando el mismo viaje un día más, otro día menos y quien sabe qué al tercer día.

La ruta en coche y el kilometraje es un punto básico a tener en cuenta.

Posteriormente nuestra atención se centró en el alojamiento, quebradero de cabeza durante unos cuantos meses y motivo de otro par de reuniones para concretar lugares, recorridos, ciudades y planning general, montando un calendario concreto detallado hasta las horas y decidiendo, en la medida de lo posible, cómo iba a transcurrir cada jornada y cuáles iban a ser sus ingredientes.

Decidimos llevar un ritmo de reserva de uno o dos hoteles por mensualidad a partir de marzo, por lo que la dinámica de reserva y pago se fue convirtiendo en rutina hasta que el mes pasado, sin apenas pensarlo, reservamos el último hotel de todos.

Alquilar coche comporta uno de los gastos más elevados en todo viaje del RollerCoaster Team.

Finalmente, cuando ya la cuenta atrás empezaba a mermar los números, decidimos realizar el último paso importante que es el alquiler del coche, solventado sin más problema gracias a la pericia y experiencia de Marc, conocedor del mundillo de los alquileres y experto conductor.

Detalles clásicos

Paralelamente a estos rituales, reuniones y pasos importantes, se han ido concretando también otros hechos quizás no tan relevantes a nivel logístico, pero sí básicos para la existencia y tradición del RollerCoaster Team.

El primero de ellos fue el diseño del logotipo de este año, que podéis contemplar encabezando esta entrada y de cuya realización me encargué yo mismo siguiendo un estilo a modo de escudo y plasmando detalles recordables con el paso de los años (la bandera americana, las vías de coaster, el año de fundación del RollerCoaster Team o los tres puntos superiores que representan los viajes realizados con anterioridad).

El diseño final de las camisetas para este 2011: elegante, simple y muy visible.

Tras este detalle visual empezó el diseño de las camisetas que luciremos al máximo posible (por cuestiones de higiene) durante nuestras visitas a los parques. Unas camisetas que pasaron por un largo proceso de diseño y elección de colores, estructura, tipografía o incluso tipología de tejidos (ya que es importante pensar en las temperaturas y en la adecuación de la tela para aguantar diferentes mojados en todo un día). Este año añadimos un curioso complemento a las camisetas: chapas con el escudo nombrado anteriormente.

Ya en la recta final, a falta de unos meses para hacer realidad nuestro sueño, Marc se puso manos a la obra en un auténtico homenaje que ha ido viendo como año tras año se perfeccionaba hasta llegar a convertirse en un auténtico objeto de culto: el Dossier de Ataque. Un extenso, minucioso y elaboradísimo cuaderno con más de 60 páginas de extensión que recopila absolutamente toda la información necesaria para el viaje, facilitando mucho más el acceso a ella en cualquier momento e incluso nos proporciona herramientas complementarias para hacerlo más entretenido, como un listado de credits a realizar, un listado de rides por montar, diferentes achievements para cumplir y numerosa información sobre los recorridos en coche, los vuelos o los lugares por los que pasaremos.

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En definitiva, y como cierre a la entrada de hoy, valga decir que el trabajo y las horas invertidas en este viaje son posiblemente más de las que en realidad gastaremos montando en absolutamente todo como cosacos.

El jueves, y justo a apenas unas horas de iniciar la gran aventura, os colgaré la última entrada antes del viaje, donde analizaré muy por encima los parques que vamos a recorrer y los credits que vamos a montar, para que luego a la vuelta podamos comprobar lo que finalmente se hizo bien o lo que, por el contrario, quizás no se pudo hacer por causas externas (meteorología, averías, cambios de planes, etc).

Ya sabéis, dentro de dos días tenéis una cita pendiente con Bloggercoaster y os tendré que decir adiós (al menos oficialmente a falta de quizás alguna mini-review desde tierras americanas) durante al menos dos semanas.