World Joyland (parte 3)

Sin prisas pero sin pausas, así continuaremos nuestra ruta por el fascinante mundo que se nos abre ante nosotros en el gran parque de World Joyland, alejado de la ciudad de Shanghai y más cercano a la zona en expansión de Changzhou. Durante las dos primeras entradas dedicadas al parque pudimos ver en Bloggercoaster que World Joyland juega fuerte con sus cartas de tematización y adaptación a temáticas algo diferentes de lo que suele ser usual.

Como vendrá siendo tradición, aquí os facilito los enlaces a las entradas publicadas hasta el momento:

• World Joyland: Fantasy Square
• World Joyland: Terrain of Magic/Universe of Starship
• World Joyland: Universe of Starship/ Holy Mountain/ World of Legend
• World Joyland: Magic Castle
• World Joyland: Tao Bao Street (Mole's World)

Así pues hoy, en Bloggercoaster, vamos a acabar de explorar lo que nos quede por ver de Universe of Starship y echaremos un vistazo también a dos de sus otras áreas temáticas: Holy Mountain y World of Legend.

 El dominio absoluto de Sky Scrapper

Para qué lo vamos a negar, cuando uno accede al área de Universe of Starship las paredes con tonos amarillos y dorados llaman la atención, la altura de las torres de caída controlada de S&S llaman la atención, incluso el edificio gigantesco de los simuladores que ayer mismo os mostré llama poderosamente la atención, pero si uno es amante de las coasters y valora el arte de una buena ingeniería, es imposible llegar a este punto y no abrir la boca con Sky Scrapper, la que puede ser fácilmente la B&M más extrema y rompedora de los últimos años:

Lo es tanto que me reservo una entrada (probablemente para la semana que viene) en la que la analizaré muy a fondo, dándoos a conocer sus elementos, sus rincones, sus partes más intensas (porque tiene varias) y en general las sensaciones que transmite. Olvidad cualquier B&M extrema que creáis haber probado hasta ahora, porque Sky Scrapper es realmente la primera que me ha hecho plantearme realmente si repetir o no ciclo.

Pero como estoy hablando de edificios y otras rides del área de Universe of Starship, bien vale la pena comentar que hay dos elementos estructurales de Sky Scrapper que se introducen, tímidamente, en el vial de visitantes (que como podréis comprobar por la lejanía con la que están tomadas las fotos, aquí goza de 20 o 30 metros de anchura). La salida de la coaster es, si cabe, más prominente que la propia entrada (algo realmente curioso en un parque que, como hemos visto hasta ahora, es un amante de lo barroco nada más llegar al acceso de una ride), la encontramos representada en forma de pirámide dorada y en su interior podemos encontrar el clásico puesto de photo-rides:

Lo que me pareció realmente curioso es el edificio del transfer que como siempre suele hacer las veces también de taller de reparación o mantenimiento. En este caso es un edificio de obra vista pero que, para disimularlo con el entorno (no se yo si muy bien...) han cubierto de impactantes imágenes manga de robots mecha y criaturas aladas con espadas relucientes, tal que así:

Como podéis observar por las fotografías, pese a ser la major del parque y la que más atención recauda entre los visitantes, el lugar estaba terriblemente solitario. Se veía de vez en cuando algún tímido chino o china paseando por los alrededores, pero os aseguro que el panorama general durante el día era parecido a lo que se ve aquí.

Alrededor del gran tambor/pabellón dorado donde podemos encontrar el simulador que os mostré en la anterior entrada (el de movimiento en 3D) se agolpa una típica zona de puestecitos y ferias coquetamente decorados y que si ya en los parques occidentales suelen ofrecer un montón de productos de peluche, imaginaros en un país donde no les importa vender licencias falsas o imitaciones:

En este punto el parque, que había gozado de un vial prácticamente recto y encarado hacia el fondo, hace un viraje repentino hacia la derecha (empezando a cerrar el clásico círculo de los parques de estructura circular, como es lógico). Seguimos en Universe of Starship pero de repente el tono de la zona adquiere un aire más bélico y rompedor, no tan tranquilo y apacible como hasta ahora parecía ser. Vemos por ejemplo un extraño arco que cruza de edificio a edificio en lo que parece ser una batalla entre dos naves a cañonazo limpio. Temáticamente pobre, para qué negarlo, esas llamas de fuego me empezaron a recordar muy mucho al uso que se hace del elemento cartoon en áreas como Marvel Super Hero Island (Islands of Adventure):

Y efectivamente, en este punto nos encontramos con un par de edificios que confirman esa tendencia. Nos encontramos muy cerca de haber completado la mitad exacta de este círculo parqueril y ante nosotros se vuelve a abrir una de esas enormes plazas que nos dan a elegir dos direcciones. Si seguimos rectos vamos a parar al área de World of Legend, pero si torcemos a la izquierda se nos ofrece la posibilidad de visitar la Holy Mountain. Obviamente, para mostraros la totalidad del parque, viraremos hacia la izquierda y subiremos la imponente Holy Mountain.

En la esquina de ese giro podemos localizar Galaxy Energy, otro de esos grandes restaurantes de fachada espectacular y grandes estructuras pero que luego al entrar en su interior uno localiza un restaurante self service como los de toda la vida (no os dejéis engañar por las fachadas en China, lección número 1). Como podréis ver, personajes con capas y trajes de mallas, llamas y en general un aspecto bastante superhéroe que hace pensar inevitablemente en DC o en Marvel:

Vale la pena decir que, como en el resto del parque, el edificio es 2 o 3 veces más grade de lo que realmente sería necesario para un simple restaurante temático. Lo podemos ver por ejemplo con este gigantesco torreón de acero que vendría a servir para absolutamente nada, es decir, lo importante es el pequeño y discreto edificio de al lado, donde podemos ver uno de los accesos a Galaxy Energy:

Como ya os he dicho, caminaremos por esta zona y nos desviaremos momentáneamente de la ruta circular para presenciar una de las más bastas maniobras de tematización totalmente gratuita (para el cliente) que me hizo replantearme realmente la intención por parte del parque a la hora de construir semejante mole de cemento.

Poderío temático chino

Quien más quien menos ha visitado un parque temático, ha alucinado (o no) con sus ingeniosas estructuras intentando mostrar culturas como la china o la mexicana, incluso puede haber presenciado el intento por mostrar un área temática algo más rompedora sobre un tópico algo menos común. Pero la cota a la que llega Holy Mountain, ya no solo a nivel temático sino a nivel estructural, rompe en absoluto con todo lo que se haya podido presenciar hasta ahora a nivel de parques temáticos.

Tematizar una montaña, eso es Holy Mountain. Pero no una montaña de roca artificial, no una de esas grandes estructuras de cemento pintado que tanto nos gustan, no. Una montaña de verdad, que se encontraba en tu camino cuando construiste el parque y que, lejos de intentar esquivar, le otorgas una presencia y, para más inri, le aplicas el estatus de área temática del parque. Un invento tan complejo y megalómano como este tiene este imponente aspecto:

En un primer término una gran estatua de una hechicera con capa lila nos saluda en una bonita fuente rodeada de escalinatas a ambos lados. Tras de ella se extienden paredes en espiral y decoradas con bonitos motivos florales y más allá empezamos a vislumbrar una larga escalera doble partida por la mitad por amables zonas ajardinadas con arbustos genialmente cortados:

Al fondo, una especie de forma orgánica plateada y negra se alza una treintena de metros más, para lograr una cúspide mucho más alta que cualquier elemento que se encuentre a 500 metros a la redonda. La ride aquí no tiene más secreto que el que nuestras piernas puedan ofrecernos: subir peldaño a peldaño hasta lograr unas vistas del valle y del parque realmente espectaculares:

Si os fijáis a lado y lado de la escalinata podemos encontrar grandes estatuas negras de guerreros icónicos de la cultura mágica y de juegos online, motivo recurrente del parque en toda su extensión. Veis abajo el tambor dorado, Sky Scrapper con su color celeste e incluso se puede vislumbrar la torre de lanzamiento controlado de S&S (hacia la derecha) y Clouds of Fairyland a la izquierda, la skyloop de Maurer Söhne con la torre del lift en un oscuro azul marino.

Y tras de nosotros se alza poderoso esa especie de hongo/tubérculo de acero y cemento que no me quiero atrever a pensar lo que quiere representar, pero que sin duda impone muchísimo desde la base. Construido con un armazón de cemento armado como pudimos ver meses antes de su construcción, este edificio no cumple ninguna función como atracción, sino que rescata las viejas tradiciones de los parques de atracciones europeos y ensalza un mirador, un punto destacado y privilegiado que nos ofrece grandes vistas, sin más:

Si nos fijamos en el mapa, se indica que lo que hay en su interior puede ser un restaurante, aunque como comprenderéis, no entiendo demasiado de chino así que tampoco lo puedo decir a ciencia cierta (además en el momento en el que Luis subió a comprobar esta extraña estructura, el lugar estaba cerrado).

 Tenebrosidad y oscuridad

Momento ahora de descender por la escalinata y bajar de nuevo al reino de los humanos (si lo que pretendía era hacernos sentir por un momento dioses). Mientras lo hacemos vemos, en la lejanía, una de las rides que por su situación estructural nos olvidamos por completo de ver de cerca. Se trata de la típica ride de coches eléctricos guiados por carriles, similar a las Autopias de Disney y a muchas otras rides que localizamos en otros parques occidentales:

Llegados ya a la parte baja de Holy Mountain de repente nos encontramos en un oscuro rincón gobernado por la idea de no saber exactamente en qué momento cambiamos de temática y por un batiburrillo de rides y theming realmente desconcertador, ya veréis.

El primer edificio que nos saluda es el de una ride que, por desgracia, estaba cerrada por completo y en proceso de ser o bien desmantelada o bien transformada. Su nombre es Soul Hunter y por lo visto ofrece (u ofrecía) un recorrido por una mansión encantada por parte de dos equipos de 6 personas cada equipo. Ataviados con una protección y una pistola, nos dedicábamos a recorrer la mansión intentando vencer al equipo contrario, vamos, lo que normalmente se conoce por Laser-Tag pero llevado a un punto más extremo en cuanto a ambientación, haciéndonos entrar de lleno en algo parecido a un videojuego shot'em up. El aspecto exterior de la ride me recordó muchísimo a una mezcla de arte escandinavo con la fantasía usada en parques como Efteling en sus edificaciones:

El problema es que incluso habiendo estado abierto, habría sido realmente difícil reunir a 12 personas para recrear el combate. Creedme si os digo que incluso para lanzar ciclos con las coasters hubo problemas en ese aspecto...

Regresemos a World of Legend para encontrarnos de lleno con el primer credit del que os hablaré al detalle. Se trata de Dragon Roaring Heaven (el paraíso del dragón rugidor) una coaster que no llama la atención tanto con su espectacular y bastante completo theming, como veremos, sino más bien por el hecho de parecer una obra de Vekoma pero no, Dragon Roaring Heaven es obra de Golden Horse, la dudosamente popular empresa china que se dedica a recrear falsificaciones de empresas occidentales y las vende a precios escandalosamente rebajados. Este es el aspecto bastante completo que ofrece el castillo donde podemos localizar las consignas (por si no queremos perder nada en un credit evidentemente familiar), las colas y la estación de la coaster:

Y aunque es relativamente difícil encontrar material de calidad y en vídeo, sí he conseguido rescatar de Youtube un completo reportaje gráfico donde vemos (offride y onride) el aspecto que ofrece este dragón rugidor. Repito: no os dejéis engañar por las apariencias, este credit NO es de Vekoma aunque lo parezca incluso calcando su layout:

)

Bien, como ya en otras ocasiones he riddeado la versión genuina de los holandeses, me veo en aparente calidad de poder comparar ambas versiones y sacar en conclusión un veredicto. Si estáis interesados o interesadas en leer al detalle las partes del layout y sensaciones que ofrece la versión de la holandesa Vekoma, podéis echar un vistazo a esta entrada donde hablé de Olandese Volante, en Rainbow Magicland, el clon (esta vez sí oficial) de este Dragon Roaring Heaven:

Y qué queréis que os diga, tampoco no me pareció tan mala. De hecho recuerdo que durante todo el viaje íbamos pensando que era de Vekoma y el hecho es que el calco está bastante logrado, solo que podría destacar un par de transiciones de elementos y alguna que otra curva que resulta molesta por sacudidas, pero por otra parte es algo que la versión holandesa también tiene, así que todo queda más o menos parejo entre las dos versiones.

De hecho la copia está tan bien realizada que incluso los pequeños puntos de airtime (muy pequeños realmente) también se logran con relativa facilidad. Sin duda el punto fuerte que doblega por completo esta versión china de la versión oficial es el theming, que podéis comprobar en las fotografías y que envuelve por completo el track (tanto en la parte frontal como en la trasera) plagando el recorrido de puntos de choque, túneles y arcos que otorgan una experiencia más enriquecedora a un credit que, como punto de partida, tiene ya de por sí una buena nota por mi parte. En la versión oficial holandesa el theming puede ser espectacular generalmente en la parte frontal y en el lift, pero la parte trasera queda abandonada a ojos del visitante común.

Dragon Roaring Heaven no me pareció mala (y de hecho recuerdo que fue el comentario general al salir de ella), me parece una tipología de credit bastante aceptable que creo que muchos parques con viejas Galaxy's como majors podrían permitirse en algún momento u otro de su vida (sin tantísimo armazón de cemento, obviamente). El problema aquí es que el logro y esfuerzo de Vekoma por vender su versión queda totalmente lastrado por la avaricia comercial de Golden Horse, el gigante chino falsificador de coasters.

El hazmereír de las licencias

Por si no tuviéramos suficiente con la copia de licencias de Disney, de Blizzard (propietaria de los derechos de Starcraft y World of Warcraft) o de Warner (muñecos y demás), World Joyland se apunta al carro de copiar algo tan cercano y amenazador como franquicias de anime que, como se podría decir, son propiedad de empresas que están a un tiro de piedra (Japón). Fijaos sino en esta amalgama de pequeños edificios tematizados en evidente aspecto cartoon (totalmente acorde con absolutamente ninguna temática presente en el lugar, valga decirlo):

Por una parte tenemos esta increíble copia de Kung-fu Panda, la famosa película de Dreamworks, que esta vez queda rebajada a una tienda de noodles donde nos podemos meter entre pecho y espalda un bol entero de fideos chinos con decenas de condimentos variados. Pero para promocionar la tienda (que por otra parte no está mal que exista) utilizan al famoso panda luchador con un gran lazo en forma de fideos amarillos, tal que así:

No contentos con ello, al otro lado de esta manzana de edificios, encontramos King of Pirates, que vendría a ser la manera de venderte un simple Rockin' Tug de Zamperla pero con una tematización que nos recuerda demasiado al anime/manga One Piece, de grandísima fama tanto en oriente como en occidente. Mirad sino las siluetas que se ven en el cartel de la entrada, llegando al extremo de no usar la imagen pero sí la silueta, para intentar colar la licencia sin pagar absolutamente ni un yuan:

Las referencias visuales al barco de One Piece con la calavera pintada en las velas, a su protagonista (Monkey D. Luffy) con el gorrito de paja así como a otros personajes del anime o del manga, convierten este pegote temático en algo mucho más humillante todavía si habéis podido ver capítulos de la serie. Al principio hace gracia ver que un parque dedica una ride o una zona a un anime que has visto... pero cuando ves que no se hace referencia directa a nadie y que las formas, colores, nombres o apariencia están totalmente desubicadas, es cuando uno adquiere un relevante mosqueo:

En definitiva: World Joyland demuestra tener un plantel con ambos lados de la balanza. Por una parte tenemos genialidades temáticas de la categoría de Sky Scrapper o la impresionante Holy Mountain (que podéis ver allá atrás en la fotografía que hay aquí arriba mismo), pero por otra parte tenemos un parque capaz de copiar al dedillo un credit hasta hacernos creer que es una Vekoma real o de destrozar por completo sagas temáticas tan respetadas y valoradas como One Piece o Starcraft.

El Yin y el Yang, el blanco y el negro, la calidad contra la rentabilidad. Oscuro trasfondo el que esconde de manera muy artificiosa pero a la vez genial un parque que resulta tener muchos pliegues, muchas capas para analizar pero que, sin duda, está demostrando tener una colección de rides y de detalles digna de los grandes parques europeos.

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Y aquí nos quedamos, a las puertas de descubrir la skyloop de Maurer Söhne (tristemente famosa por sus paradas de emergencia con gente montada en ella) y empezando a girar ya para completar el círculo temático de este curioso World Joyland.

Hasta ahora hemos visto el trato que se le ha otorgado en el parque a la épica de las batallas ancestrales en Terrain of Magic, a la ciencia ficción plasmada en los edificios de Universe of Starship, al culto semireligioso que se ofrece con Holy Mountain o al trato de dudosa rigurosidad que se otorga a la fantasmagórica World of Legend.

Nos queda por delante echar un vistazo al mundo fantástico y colorista de las hadas y adentrarnos de lleno en el área kiddie del parque, por lo que todavía queda mucho de lo que hablar. Y a ti, ¿qué te está pareciendo esta visita a World Joyland por el momento?