Como iré haciendo con cada entrada, si queréis podéis repasar las anteriores entradas e ir siguiendo el recorrido que llevaremos por este genial parque de atracciones finés:
Dicho esto hoy, en Bloggercoaster, es el momento de seguir descubriendo la mitad este del parque, completada toda la mitad oeste. Nos encontraremos por el camino auténticas rarezas, coasters y sorpresas... ehm... "remojantes".
Schwarzkopf, ¿también aquí?
Como recordaréis de la primera parte de este análisis, empezamos la trayectoria a lo largo de Särkänniemi en una gran plaza situada nada más entrar al parque y adquirir la wristband que nos daría acceso a todas las coasters y rides. Cuando llegamos a esa plaza, con la vista puesta en el Delfinaario, giramos hacia la izquierda.Pues bien, volvemos a esa plaza, situada en el centro del parque frente a la torre Näsinneula, para esta vez tomar el sendero que nos llevará hacia la derecha, donde se encuentra la práctica totalidad del parque de atracciones propiamente dicho (es decir, hasta ahora esto no ha sido más que un mero aperitivo):
La zona que recorreremos es alargada y bordea todo lo que sería la zona baja del parque, donde encontramos una hilera de rides, coasters, restaurantes, tiendas y elementos temáticos que bordean una especie de gran canal de unos 100 metros de anchura:
Al emprender nuestro camino por esta ruta de lo primero que nos daremos cuenta es de que nos metemos en un denso bosque de hayas y abetos, lo cual facilita los espacios de sombra y la tranquilidad en general. Es por eso que encontraremos en este lugar, encajado entre la vegetación, el restaurante más antiguo de todo el parque, el Männikkö Grill, una suerte de restaurante/brasería con uans magníficas terrazas y vistas a la naturaleza que envuelve el parque:
A escasos metros de este restaurante es cuanto nos encontraremos una JOYAZA. De esas que realmente asombra por el hecho de que se encuentre aquí, en Finlandia, justo donde uno jamás esperaría encontrarla.
Se trata de Pavilion Carousel, una ride fabricada por la compañía de Anton Schwarzkopf que tuve el placer de probar años atrás ya en Holiday Park (justo antes de que el grupo Studio100 a.k.a. Plopsa empezara con la tarea de modernización, tematización y limpieza) y de la cual pensaba que jamás podría volver a probar un especimen... hasta que llegué a Finlandia:
La idea, como el nombre indica, es la de un carousel giratorio solo que en vez de caballos vamos alojados en bancos situados alrededor de un eje central que, durante el transcurso del ciclo, empieza a girar y a elevarse inclinándose hasta unos 5 metros de altura:
Todo ello amenizado con la música tradicional de los carouseles de época y con una decoración realmente conseguida, muy victoriana. La estructura, el funcionamiento y la decoración de la ride con grandes lonas en el techo, evocan irremediablemente la nostalgia que solo las rides y coasters de Schwarzkopf saben trasladar a uno. No se realmente la naturaleza y existencia de este tipo de rides en el resto del mundo, pero me arriesgaría a decir que no deben quedar más de 2 o 3 activas en todo el mundo.
Un paseo "sobre" Tornado
Como habréis podido adivinar no, no me dedicaré a analizar Tornado en esta entrada. Más que nada porque quedé gratamente sorprendido de toda su estructura, suavidad y layout, así como de la dinámica de su funcionamiento en este parque. Por ello, como es lógico, le dedicaré una entrada individual a modo de Bloggercoaster Classics.
Aún así vale la pena indicar que una vez dejamos atrás la arboleda que nos había estado acompañando durante nuestros últimos pasos, a mano izquierda, podemos encontrar este delicioso combo visual a base del lift de la coaster y uno de los desniveles del flume del parque (muy único en su especie también y del cual ya hablaré más adelante):
Por extraño que parezca, en Finlandia, en agosto, hacía bastante más calor que en Barcelona, por ejemplo. Esto es algo que me pilló totalmente desprevenido, por lo que he de confesar que pasé bastante calor durante todas las jornadas del viaje (pese a ir preparado con manga corta). Así que a sabiendas de esto, el parque se encarga de distribuir por varias zonas de su extensión elementos temáticos que hacen las veces de vaporizadores en forma de algo así como árboles petrificados:
De repente, como os dije, dejamos atrás los árboles, dejamos atrás tierra firme, echamos de menos lo verde y la tierra y pese a que el color del suelo delata el material del que está hecho (cemento armado, básicamente), es desde las alturas donde podemos apreciar exactamente dónde estamos:
Efectivamente, esa superficie de cemento rectangular elevada por la que paseamos pertenece ni más ni menos que a la estación de carga de Tornado, la coaster invertida de Intamin, excavada en la roca viva, pero cubierta por grandes planchas de cemento, en su momento os mostraré mejor esta proeza arquitectónica, pero vale la pena situarnos un poco y ver la gran obra que se esconde bajo nuestros pies.
Es en esta extensión de cemento y acero donde podemos encontrar un par de kiddies spin-rides clásicas como esta Ladybird:
O este otro clásico en forma reducida llamada Coffe Cups:
Si echáis un vistazo a esta última fotografía podréis encontrar la discreta y diminuta entrada de Tornado, a la derecha. Id con mucho ojo ya que es terriblemente fácil equivocarse y acceder a la coaster por la salida, situada en el piso de abajo frente al wave-swinger que veremos a continuación.
Pizzas y remojo
Lo dicho, tras descender de esta plataforma de cemento a través de una agradable rampa decorada con jardines y fuentes a lado y lado del camino, nos encontraremos de lleno con otra planicie en la que se encuentra Wave Swinger, que como su propio nombre indica es un wave-swinger de la italiana Fabbri:
Si avanzamos un poco por nuestra izquierda veremos que se desarrolla frente a nosotros otra gran explanada en la que se distribuyen distintos accesos a zonas del parque así como edificios de alimentación, tiendas, restaurantes y alguna que otra ride menor. Allí es donde por ejemplo podemos encontrar la Minetti Gelato Factory, junto a una consigna del parque y las taquillas del Speedboat, del que os hablaré un poco más adelante en la entrada:
Frente a nosotros encontraremos el que es el restaurante más concurrido y solicitado por los visitantes de Särkkänniemi, el Pizzeria Pelle, que como su propio nombre indica, se trata de una pizzeria en la que podemos degustar deliciosas porciones de pizza tanto en su tematizado interior como en la Terassi, una terraza con vistas al canal de agua que os comenté anteriormente:
A decir verdad, los precios de la comida tanto en Särkänniemi como en Finlandia en general son bastante elevados, pudiendo costar un menú en esta Pizzeria Pelle alrededor de 20 o 25 euros (sin ser realmente un menú más allá de lo normal para este tipo de locales), por lo que os recomiendo que antes de acceder echéis un vistazo a su tabla de precios e ingredientes, colocada justo antes de entrar:
Un pequeño truco ahorrador: si en vez de entrar pasáis por la parte izquierda del edificio, bordeando, os encontraréis una pequeña terraza de unas 3 o 4 mesitas y un pequeño puesto con una ventada donde podréis pedir. Se trata de un anexo de la pizzeria en el que sirven también porciones de pizza, refrescos y algunos snacks, solo que a precios mucho más económicos y asequibles.
Así fue por ejemplo como yo pude degustar una porción de pizza peperoni y un refresco de cola por "solo" 7,50€:
Con el estómago lleno y la adrenalina a tope, es como me encontré la que fue una de las grandes sorpresas de la jornada, algo que para nada esperaría haber probado aquí en Särkänniemi (y ya van bastantes cosas, si os fijáis).
Se trata de Speedboat, una "ride" en la que tras enfundarnos unos chalecos salvavidas y recibir una pequeña clase por parte de un formador nos meteremos en una lancha equipada con motores fueraborda de gran potencia y, a velocidades que superan los 100 km/h, nos adentraremos en las oscuras y profundas aguas del lago Näsiselkä que se extiende decenas de kilómetros más allá de nuestra vista:
Para ello hay que pagar un importe de 15€ que van aparte de nuestra wristband (por lo que no, NO viene incluido con el precio), pero merece muchísimo la pena experimentar esto por lo menos una vez en la vida.
Recientemente pude probar algo similar en Movieland Park (Italia), pero os aseguro que no hay nada comparado con sentir la velocidad de este bicho, la vibración de su motor y las olas chocando contra tu rostro a más de 100 km/h. Echad un vistazo sino a este vídeo que he encontrado en Youtube grabando íntegramente uno de los "paseos":
La gracia venía cuando el conductor hacía un gesto con la mano en el aire y de repente sabías que la lancha iba a girar sobre ella misma encima del agua. En ese momento un auténtico muro de agua helada chocaba contra ti de forma estrepitosa:
En definitiva, una experiencia que muy pocos parques en el mundo pueden permitirse el lujo de tener en su interior y que sin duda alguna vale la pena experimentar, como os he dicho. Complementará por completo vuestro viaje y, en el caso de que el calor y el sol acompañen, os aseguro que quedaréis completamente mojados de arriba a abajo. Olvidad los chubasqueros.
El inevitable combo Zamperla
En el caso de Särkänniemi son muchos los encargos que esta empresa ha recibido (y que iremos viendo conforme avancemos más por la zona de flat rides, riquísima y muy variada), pero en este momento y tras un agradable paseo bordeando el canal de agua, nos encontraremos una estructura de acero que nos sonará muchísimo de otros paseos por otros parques y que puede que rompa por completo nuestra felicidad:
Efectivamente, toda esa maraña de soportes, raíles y vallados no podía pertenecer más que a una temida volare, de Zamperla, uno de los credits más incómodos y extendidos de la compañía con sede en Italia. En este caso recibe el nombre de Trombi y pese al dolor de su layout, recibe un aspecto realmente agradable y bonito como es este:
¿Qué os puedo decir de Trombi, o por extensión de las volares, que no os haya dicho ya? Como siempre os invito a que echéis un vistazo a un análisis completo que hice en su día de la que fue la primera volare de mi vida (y posteriormente han venido ya algunas más).
En el caso de Trombi la cosa no varía demasiado: los mismos giros incómodos, la misma ortopedia en los trenes, las mismas inversiones no deseadas y, en general, la sensación de que este credit no hay absolutamente por donde cogerlo si queremos definir lo que sería la palabra "placentero":
Pese a todo, vale la pena decir que probablemente sea la volare más bien localizada y con el entorno más agradable que me he encontrado hasta el momento. Fijaos sino el espectacular paisaje que presenta el skyline del parque en esta extremo del mismo y con la imponente figura de la torre Näsinneula a lo lejos:
Y como no podía ser de otra manera, hablar de Zamperla es hablar siempre de un combo. Como ya he comentado en otras ocasiones, la empresa italiana tiene un sistema de venta y encargo de rides y coasters bastante efectivo a nivel comercial y es que allá donde van rara vez se dedican a vender una única ride, sino que lo venden todo de dos en dos. Si te plantan una rockin' tug te plantarán al lado o muy cerca un wave-swinger. Si te plantan una spin-ride probablemente cerca acabes teniendo una kiddie coaster de ellos.
Y en el caso de Särkänniemi si te plantan una volare, justo al lado te encontrarás con una disk'o coaster, en esta ocasión bajo el nombre de Tyrsky:
Si antes os había hablado de que Trombi, la flying coaster de Zamperla, es la volare más bien situada y con las mejores vistas que he encontrado hasta ahora, en el caso de este Tyrsky nos encontramos ante la disk'o coaster con mejores vistas también de las decenas que habré catado hasta el día de hoy. Echad un vistazo sino a este increíble paisaje que podemos contemplar una vez riddeamos su giratoria estructura:
La verdad es que he de confesar que las disk'o coasters (que no las disk'o a secas, no confundir) me fascinan y entretienen mucho. Me encanta el momento en el cual el gigantesco platillo atraviesa el camelback del centro muy lenta y suavemente o los instantes de suspensión en el aire cada vez que la góndola alcanza los extremos de los lados.
En el caso de Tyrsky la cosa se acentúa ya que no solamente tendremos exactamente las mismas sensaciones que en cualquier otra disk'o coaster sino que el aire y el aroma de agua de los alrededores acariciará nuestro rostro en todo momento, lo que en el caso de que haga un calor considerable, es más que de agradecer:
Como podéis ver, otro de esos ejemplos de combo Zamperla tan bien hilados y llevados a cabo, en esta ocasión en forma de volare + disk'o coaster (algo similar a lo que me pude encontrar también en Flamingo Land con Hero y la disk'o que también plantó en su día Zamperla, solo que a ese combo hay que sumarle un tercer elemento ya que también añadieron un rockin' tug genérico a la ecuación).
En definitiva, unos genios de las ventas estos italianos.
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Y así, recorriendo de punta a punta el parque, es como llegamos al final de esta tercera entrega del análisis al parque de atracciones finés de Särkänniemi, en Tampere (Finlandia).
En esta ocasión hemos descubierto media docena más de rides, algunos de los restaurantes más importantes del parque, un par de joyas escondidas y un montón de elementos que siguen haciendo de este un parque de atracciones pintoresco y realmente único en el mundo.
Aunque para ser justos, nos queda todavía un montón de singularidades más por delante. ¡Esto no ha hecho más que empezar!
El dancing pavilion ahora le gestiona Gerstlauer, como la mayoría de patentes de Scharzkopff. Y si, están en peligro de extinción, pero si quieres puedes comprar alguno ;)
ResponderEliminarDe hecho la construcción fue a cargo de Schwarzkopf pero el montaje y posterior mantenimiento pasó a ser de Gerstlauer, que por lo visto tuvo licencia para distribuir y gestionar rides de la compañía de Anton durante bastantes años en el país. Así que es de Schwarzkopf, pero a la vez también es de Gerstlauer.
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