TOP20 - ¡Las rides más extremas! (parte 3)

PARTE 3

Poco a poco vamos escalando posiciones en el ranking particular que inicié hará cosa de un par de semanas en el cual me propuse presentaros una recopilación de las rides más extremas a las que he tenido el placer (o valor) de plantar cara hasta ahora.

Durante las dos anteriores entregas os hice un repaso desde la posición 20 hasta la 11 pudiéndonos encontrar rides acuáticas, rides giratorias, rides de altura, de velocidad, free falls... en definitiva una recopilación que ya de por sí representaba un alto nivel de respeto. Pero ahora, cuando entramos por las puertas de la décima posición, es cuando las cosas se empiezan a poner interesantes.

Así pues hoy, en Bloggercoaster, pasamos el ecuador de este personal TOP20 y empezamos a encarar las primeras posiciones de la lista para conocer cuáles son las rides más extremas del mundo. ¿Empezamos el ciclo?

10. Eagle's Claw 

Lightwater Valley

Ripon (Inglaterra)

Voy a dejar algo claro: del modelo afterburner facturado por la empresa holandesa KMG he probado hasta ahora unos cuantos en distintos parques de todo el globo, por lo que el hecho que haya elegido el espécimen de Lightwater Valley obedece más a cuestiones de mantenimiento, theming y operativa, que hacen que se disfrute en mayor medida de las fuerzas y efectos que genera esta ride en el cuerpo:

Dicho esto, nos encontramos ante una ride pendular con un eje elevado a 22 metros de altura, un enorme brazo que sujeta la canasta dividida en 6 brazos que sujetan las secciones de asientos de 4 pasajeros por sección. La canasta a su vez tiene un eje central que gira a la vez que oscila el péndulo, por lo que la sensación de desorientación por parte del viajero es total, a la vez que se adquieren velocidades de balanceo bastante extremas.

Os quedará mucho más claro todo esto tras poder ver este genial vídeo off-ride creado por los colegas de Theme Park Worldwide:

¿Qué la hace tan extrema?

Pese a no presentar unas medidas tan espectaculares como las que puede mostrarnos un giant-frisbee o incluso un frisbee estándar, lo cierto es que el hecho de que la estructura tenga una rebaja de peso tanto en los brazos como en los asientos hace que la velocidad que adquiere en cada balanceo sea superior y las fuerzas que se experimentan mucho más potentes que en un frisbee normal y corriente.

En Eagle's Claw además de la velocidad natural que adquiere esta ride, tenemos también un tipo de paisaje y un entorno que acentúan mucho más la intensidad que vive nuestro cuerpo con cada ir y venir. Es por ello que considero que tanto Eagle's Claw como todos los modelos de afterburner de KMG son merecedores de entrar en esta décima posición de este TOP20.

9. Apollo

Happy Valley

Chaoyang (China)

Giant frisbees hay algunos repartidos por todo el mundo y generalmente la visión de su movimiento pendular suele ensimismar por igual tanto a los que buscan emociones fuertes como a los que prefieren observar cómo los que se encuentran en el extremo de su brazo "sufren" las terribles fuerzas que en ellos se experimentan. Pero si hay uno que combina a la perfección las emociones fuertes que ofrece este tipo de ride con la estética, ese es Apollo, en el lejano parque temático de Happy Valley Chaoyang (o más conocido como Happy Valley Beijing):

Son 24 metros de altura en la estructura que se convierten en casi 40 una vez la góndola circular que sujeta el enorme brazo de la ride adquiere su máximo arco de 120º de inclinación. Todo ello sumado a una velocidad realmente estremecedora la convierten en una de las atracciones más desafiantes que pueda tener un parque en su catálogo. En el caso del ejemplo de Happy Valley Beijing, todo queda rematado con un theming y una integración (rodeando casi por completo la ride de agua) realmente admirables. Mirad sino cómo se comporta la ride en uno de sus ciclos:

¿Qué la hace tan extrema?

Desde luego hay otras como Apollo, sin ir más lejos Max Air en Cedar Point, otra giant frisbee de Huss que también he tenido el placer de probar, pero pese a que la inclinación, altura y velocidad que toma esta bestia una vez está en su máxima potencia es similar en ambos casos, en el caso chino la integración de la ride lo es todo en absoluto:

Volar a decenas de kilómetros por hora por encima de nada más que agua, atravesar una estructura de roca artificial custodiada por 4 gigantescas serpientes y repetirlo en un largo e intenso ciclo convierten en esta ride en todo un desafío para quien se atreva a probarla. Además, tiene el aliciente de que el visitante asiático, por lo general, grita mucho más a bordo de las rides y coasters que los visitantes occidentales, por lo que añadid un extra de decibelios ensordecedores a vuestros oídos. Apollo es toda una experiencia sobrevolando el cielo de Beijing, pero casi del revés.

8. Tomb Raider Machine

Movieland Studios

Lago di Garda (Italia)

De nuevo volvemos a Movieland Studios, en el norte de Italia, para adentrarnos en una flat ride que mezcla dos conceptos clásicos como son la inspiración en el movimiento del top spin y el theming de pura aventura, pero lo hace de una manera completamente diferente a lo que podríamos preveer. Su nombre es Tomb Raider Machine y, por el nombre, probablemente hayáis pensado ya en la voluptuosa a la par de de ágil Lara Croft ya que, efectivamente, esta ride está inspirada en las aventuras de la caza-tumbas más famosa de los videojuegos:

La particularidad de esta windshear de Zamperla (que no top spin, mucho cuidado) es el estudiado uso individual de los motores que se sitúan en cada extremo de los brazos que sustentan la alargada góndola de 32 asientos y cuya combinación puede llegar a generar la vertiginosa cifra de 11 inversiones en total, todas y cada una de ellas de una dinámica asombrosa con un ciclo completo y lleno de giros inesperados. Para más muestra, podéis echar un vistazo a otro de esos geniales off-rides de CoasterForce que podemos encontrar vía su propio canal de Youtube:

¿Qué la hace tan extrema?

Quizás no lo habéis leído bien, pero estamos hablando de 11 inversiones. Hasta en 11 ocasiones vuestro cuerpo estará mirando al suelo y después al cielo, y después al suelo, y así hasta dar 11 vueltas sobre vosotros mismos o con inclinaciones que quitarían el hipo hasta al más atrevido de los aventureros. Tomb Raider Machine resulta ser un nido de giros que os harán gritar de emoción (sobretodo los giros hacia atrás en los que poco a poco iréis viendo el cielo para luego volver a ver el suelo.

Ah... ¿he dicho ya que podréis encontraros cara a cara con la mismísima Lara Croft?:

Desde luego la experiencia con esta flat no es desagradable, ni extrema en el nivel de que os pueda dejar mal cuerpo, pero sin duda se trata de una de las flats más completas en cuanto a satisfacción una vez acabe su ciclo pues tiene el perfecto equilibrio para haceros notar el riesgo de dar tanta vuelta, pero sin tener que padecer por el estado de vuestra cabeza o vuestro estómago.

Además un theming muy completo (de principio a fin de la ride) y una ambientación bastante adecuada de cara a merecere el nombre que recibe la ride la hacen ganar sin duda puntos para permanecer en esta posición del TOP20.

7. Pegasus

Power Park

Kauhava (Finlandia)

Dejé claro en su día y todavía lo digo a día de hoy que Finlandia fue, en su momento, uno de los viajes más sorprendentes en cuanto a la cantidad y variedad de cosas que allí pude experimentar y encontrar. El paso por Helsinki, Tampere y Kauhava hizo que mi experiencia en parques cambiara considerablemente y fue el encuentro con recintos como Power Park y, más puntualmente, con el riddeo de Pegasus, lo que enriqueciera por completo el momento vivido:

Facturada por la italiana Technical Parks, esta ride (cuyo nombre técnico es también pegasus 30) es una auténtica bestia de acero dispuesta a regalarnos vueltas gratuitas e inversiones inesperadas. Con un sistema de un único brazo elevado hidráulicamente y que gira sobre sí mismo, sustenta una estructura circular con un total de 6 góndolas de 5 pasajeros cada una y cuyo secreto radica en su diseño aerodinámico, que permite que giren siempre en dirección al exterior y que lo hagan libremente (no ayudadas por ningún motor), así que la cantidad de giros dependerá del peso que tenga la góndola y sus ocupantes.

Lo veréis más claro a través de este off-ride sacado del omnipresente Youtube:

¿Qué la hace tan extrema?

El caso de Pegasus es el típico en el que la velocidad que se ve desde el exterior no hace en absoluto justicia a lo que se vive en el interior, en sus asientos. Si os paráis a pensar seremos, en un abrir y cerrar de ojos, víctimas de hasta 3 tipos de giros distintos que harán que nuestra desorientación sea instantánea (y pese a todo siempre o casi siempre tendremos el exterior como punto de referencia):

Un apunte más (que la hace merecedora de este séptimo puesto) es el hecho de que los asientos están diseñados para que las piernas del viajero vayan siempre colgando, por lo que la sensación de inseguridad, pese a lo robusto y ergonómico del arnés, estará ahí presente desde el mismo momento en que la estructura suba metro a metro hasta sus 17 metros de máxima altura. La lástima es que la existencia de este armatoste sea más bien reducida, porque la verdad es que me pareció una flat bastante brillante, de un tamaño más bien discreto y con unas sensaciones óptimas.

6. Black Mamba

Wiener Prater

Viena (Austria)

Nos acercamos ya a las cinco primeras posiciones de este TOP y si algo me da un poco de pena es haber tenido que dejar esta ride relegada a una sexta posición (y con ello podréis intuir que las 5 primeras posiciones van a ser de lo más extremo posible, avisad@s quedáis).

Nos situamos como en muchas otras ocasiones en el viejo pero idílico Wiener Prater de Viena, un parque que siempre ha apostado por la variedad en su catálogo de rides y, sobretodo, por destacar con las rarezas más desconocidas, incluso a nivel mundial. Y una vez damos apenas un par de pasos por sus calles repletas de rides, coasters y puestos de snacks, nos encontramos con la implacable y majestuosa Black Mamba:

Desafiante como ella sola, sus colmillos, sus movimientos y su misma presencia erizarán por completo nuestro vello. Facturada en 2011 por la desconocida pero prolífica Funtime, ya con decir que el modelo de esta ride recibe el "amistoso" nombre de chaos pendle por parte de la propia compañía nos dice mucho, más todavía nos dirá si tenemos en cuenta que su diseño corrió a cargo del propio director del Prater, por lo que la exclusividad del producto estuvo servido desde el primer día en que estuvo operativa.

Creedme cuando os digo que dar vueltas sobre uno mismo se reinventa tras riddear esta desafiante flat extrema que, por si os queda alguna duda, aquí os dejo en forma de vídeo para que le echéis un vistazo y juzguéis por vosotr@s mism@s:

¿Qué la hace tan extrema?

El hecho de que no sea un brazo sino dos los móviles de esta ride hace que sus movimientos sean prácticamente impredecibles y aleatorios, por lo que pese a que su ciclo está totalmente automatizado es difícil de memorizar exactamente la amplitud de la vuelta que realizará la góndola en todo momento. Si a ello le sumamos el hecho de que la propia góndola girará sobre sí misma proporcionando una dosis extra de inversiones (similar a las que se reciben en un booster, por ejemplo), tenemos que el ciclo de Black Mamba es de los más locos e impredecibles posibles.

Además estamos hablando de que las revoluciones de sendos motores con los que están equipados los brazos articulados (que ya de por sí no son rectos, sino sinuosos) varían, por lo que la velocidad y potencia también varía a lo largo del ciclo, consiguiendo un efecto yo-yo bastante curioso y haciendo que prácticamente a partir de la primera vuelta estemos completamente a merced de la ride.

Desde luego Black Mamba bien merece estar en la cima de este TOP y, de hecho, lo estuvo durante un tiempo (hasta que llegaron otras más intensas...). Lo que sí tengo claro es que la experiencia de riddearla y recorrer sus 30 metros de máxima altura en el arco más amplio marca. Y mucho.

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Llegados a este punto ya son 15 las rides que hemos visto en este trepidante ranking y apenas son otras cinco las que nos quedan por nombrar. Pero ¡Ay señores y señoras! Menudas 5 nos faltan.

Yo no quiero decir nada, pero la única pista que os puedo dar es que incluso habiendo riddeado decenas y decenas de rides por todo el mundo, las 5 de las que os hablaré en la siguiente y última entrega del TOP, son de aquellas de las que me pensaría mucho el volver a probarlas y sufrir las consecuencias de sus vueltas y movimientos. Sencillamente demoledoras.

Y vosotr@s, ¿os atreveríais con alguna de las que os he mostrado en esta entrega?